domingo, 11 de diciembre de 2016

EL PRINCIPIO DEL FIN

Otro año se acaba.

Trescientos sesenta y cinco días que han pasado más rápido que nunca, aunque algunos hayan sido eternos.
En un momento muerto, de esos que he tenido a lo largo del año, me paro a pensar qué ha pasado, qué he hecho este año, qué sensaciones tengo, quién era antes y quién soy ahora. Pienso en esos propósitos de primeros de año que si no recuerdo mal los escribí en un pos-it de color verde y lo guarde en una caja marrón en la que he ido metiendo un montón de cosas que me recuerdan momentos y personas.

Abro esa caja que está en lo alto de la estantería. Lo primero que veo es un montón de papeles de diferentes colores, una pajita azul y blanca, dos pelotas de pin pon, una medalla de cartulina, un pompón verde, unas chapas, una pequeña tarjeta que pone "550 Km, el camino express" y un corazón de papel arrugado.

Lo primero que saco es la chapa y la acreditación del encuentro de Bienaventura2, ese fin de semana fue muy sorprendente, conocí a un montón de gente de toda Castilla-La Mancha, pero desde luego me quedo con los de Cuenca, me lo pasé tan bien esa noche, y por supuesto el grupo veinticuatro que fueron y serán el mejor grupo. Saco una pajita de cartón azul y blanco de uno de los muchos cafés de este año, pero que es especial porque me lo tomé en Castro Urdiales en una cafetería que era galería de arte y tienda de ropa, una tarde de paseo y relax en las vacaciones de verano con mis padres. Un palillo con  un pavo real en 3D del helado más grande de Bilbao, un palillo con un bigote de papel con la bandera de EEUU del Vips, que me recuerda una de las mejores cenas del año con Luis y María. Entradas del cine, un montón de entradas, de diferentes películas y todas con personas increíbles. Un billete de tren para ir a celebrar el final de los exámenes y del curso con las dos amigas más pesadas que existen en el Muerde la pasta. Una entrada del musical "Más de cien mentiras" que me regaló una amiga de siempre en el que participaban grandes amigos. El tique de mis primeras Oreo Golden, la cuchara de uno de los muchos cafés con Esther y sus respectivas horas y horas de charla, un globo morado con mensaje oculto del primer amigo invisible del año, la etiqueta del vestido que me puse para la cena de fin de curso y toda la fiesta que sufrió. El trozo de tela naranja que fue el mejor regalo de los diecisiete, el dorsal con el número 3494 de mi primera Holi Run que me trae los recuerdos más divertidos de ese día y de las clases de Tuerq en la amistad, un pos-it que me recuerda una anécdota de uno de tantos y tantos viernes de esos de “la de después en el bar, para hacer equipo”, el folleto de la mejor tienda de Guadalajara, Reciclamoda, que me convirtió en modelo por un día, la entrada al concierto de góspel el día que conocí a Sandra Blázquez, las postales desde el otro lado del Pacífico de una amiga que hasta cuándo está en la otra punta del mundo está más cerca que nadie. Un dibujo, un plátano, de una reflexión del colegio en el que escribí una gran verdad y que me acompaño durante meses como funda del móvil, los cartones del bingo de la Pascua más rara en cuanto a sentimientos que he vivido hasta ahora, la entrada del Museo del Prado y del teatro que fueron la mejor excursión del colegio hasta hoy, la frase que más me ha hecho pensar este año, un montón de cosas del curso de monitores, las entradas de los conciertos de ferias y una pegatina de la Peña que resume una semana de fiestas alucinantes. Un marca páginas de "Orgullo y Prejuicio" que me recuerda a la semana improvisada de las vacaciones, los billetes de avión, las entradas e incluso algunos tickets de un viaje a Múnich que nunca olvidaré. Una palabra, "Ella", que resume el mes más difícil y emocionante del año, un dibujo de la chica más loca que conozco, las canciones y reflexiones de un fin de semana entre amigos que dio para mucho, el envoltorio de un chupa Chus que consiguió sacarme una sonrisa, la mejor frase de una canción que ha marcado el año, una foto del Squad que me ha salvado la vida este campamento, la entrada de un concierto que me hizo disfrutar como una enana con dos hermanos a los que quiero con locura, más y más billetes de tren para compartir las mejores comidas con las dos petardas que adoro. Una entrada al musical "Sister Act" que me recuerda a un día indescriptible, el numerito de la tarta ganadora, la mía, en mi último María Rafols. La pulsera de Yaiza que me recuerda que siempre está ahí, el tique del Fnac de Bilbao al que me llevaron las vascas más bonitas del mundo, un muñeco de plastilina y una frase del último entre tanto que viviré como acampada y espacio, mucho espacio, de sobra, para lo poco que queda de este año, para un recuerdo de mi último auto como alumna del colegio y de mis últimas Navidades como menor de edad.
Lo más bonito de haber abierto está caja, de revisar todo lo que guarda, es la alegría de saber que he disfrutado este año, de saber que los días buenos han superado a los malos, darme cuenta de cómo he evolucionado y de lo mucho que me queda por vivir.
Por eso, por todo lo que me queda por vivir, ya he colocado una nueva caja, vacía, al lado de esta. Una caja abierta a nuevos recuerdos, a nuevos regalos, a nuevos sueños. Una caja para un nuevo año de cambios y de comienzos.
El 2016 ha sido un año de últimas cosas, de últimos momentos y el 2017 se presenta con el final de algunas etapas y el principio de muchas cosas, cosas que marcarán el principio de un camino del que es imposible ver el final.

miércoles, 30 de noviembre de 2016

30 de NOVIEMBRE

Todo tiene un principio y un final. Y los finales de cuento siento decirte que son eso, de cuento.

martes, 29 de noviembre de 2016

29 de NOVIEMBRE

- Montaba un caballo marrón chocolate, el sol se ponía detrás de ellos, el viento hacia volar su melena...
- ¿Podrías dejar de inventártelo todo?

lunes, 28 de noviembre de 2016

28 de NOVIEMBRE

Es difícil dejar de soñar, es complicado dejar de amar y es imposible dejar de pensar.-Dijo mientras se marchaba cerrando la puerta de atrás.

domingo, 27 de noviembre de 2016

viernes, 25 de noviembre de 2016

miércoles, 23 de noviembre de 2016

23 de NOVIEMBRE

Salió de casa decidida a cambiar el mundo, esperando el autobús ideo mil planes para hacerlo. Después de todo el día, cuando volvió a casa decidió que solo podía cambiar su pequeño mundo, solo podía cambiarse a sí misma. 

                  Con la colaboración especial de Don. Anónimo.

martes, 22 de noviembre de 2016

22 de NOVIEMBRE

Ella trabajaba por las mañanas en una pequeña pastelería, él trabajaba por las tardes en un bar de la zona. No se veían en todo el día pero las noches eran solo suyas.

lunes, 21 de noviembre de 2016

21 de NOVIEMBRE

Era un pato amarillo, sin nada especial a primera vista, tenía un pico naranja y escondía una gran historia bajo sus plumas. Era el pato de los patos.

domingo, 20 de noviembre de 2016

20 de NOVIEMBRE

Cuando se iba de casa los bolígrafos de su escritorio montaban una fiesta en la que los post-it eran pistas de baile y los cuadernos discotecas enormes.

sábado, 19 de noviembre de 2016

viernes, 18 de noviembre de 2016

18 de NOVIEMBRE

Bailar era su pasión vivía por y para el baile pero justo antes de la última función vio al fraile.

jueves, 17 de noviembre de 2016

17 de NOVIEMBRE

Dicen que en esta vida cada uno está por algo o para algo o por alguien... Y ¿cuándo los consigues? ¿Qué hay después? - Ya empezamos el psicólogo y sus preguntas...

miércoles, 16 de noviembre de 2016

16 de NOVIEMBRE

A veces la vida es sólo un montón de gente entrando y saliendo mientras tú abres y cierras la puerta.

martes, 15 de noviembre de 2016

15 de NOVIEMBRE

Jugaban al escondite entre la hierba, se tumbaban y contemplaban las estrellas, pero crecieron y se olvidaron de ellas.

lunes, 14 de noviembre de 2016

domingo, 13 de noviembre de 2016

sábado, 12 de noviembre de 2016

12 de NOVIEMBRE

- Sin imaginación estamos perdidos.
- Con ella también.
                                                                                                                                                                

                                  Con la colaboración especial del Señor Gallego

viernes, 11 de noviembre de 2016

11 de NOVIEMBRE

Estaba rota, deshecha, en el fondo del pozo, a punto de rendirme y entonces escuché la canción que me salvó la vida.

jueves, 10 de noviembre de 2016

miércoles, 9 de noviembre de 2016

9 de NOVIEMBRE

Mis pies, tus rodillas, mi culo, tus caderas, mi cintura, tus manos, mis codos, tus hombros, mi pecho, tu corazón, mi cuello, tu boca, mis besos, tu nariz, mis ojos, tu mirada, mi imaginación, tus palabras, tú, yo, la vida.

martes, 8 de noviembre de 2016

8 de NOVIEMBRE

Estaba tranquilamente leyendo en la cocina cuando entro el Unicornio, cogió un helado y salió sin decir nada, definitivamente me estaba volviendo loca.

lunes, 7 de noviembre de 2016

7 de NOVIEMBRE

Llegó a casa, entró en la habitación, salió del armario y empezó a ronronear a su dueña. La historia de todos los días, una doble vida para un gato espía.

domingo, 6 de noviembre de 2016

sábado, 5 de noviembre de 2016

5 de NOVIEMBRE

- ¿Desayuno con diamantes?-Me preguntó mirando la televisión.

- Prefiero tostadas la verdad.- Respondí sin entender nada...

viernes, 4 de noviembre de 2016

4 de NOVIEMBRE

Sus dedos descansaban en la parte de atrás de su móvil, sus ojos estaban perdidos en alguna parte del bar, su sonrisa había desaparecido y ella solo esperaba noticias de Pakistán.

jueves, 3 de noviembre de 2016

3 de NOVIEMBRE

Cuando hablaba sólo existía su boca, cuando reía solo pensaba en su luz y cuando por fin abrió los ojos entonces -suspiró- nunca volví a mirar otra cosa.

miércoles, 2 de noviembre de 2016

2 de NOVIEMBRE

A veces siento que no pertenezco a ninguna parte, que en realidad no soy de ningún lugar.- Dijo el monstruo que se escondía bajo tu cama.

martes, 1 de noviembre de 2016

1 de NOVIEMBRE

 Su problema fue que caminaba mirando el suelo y nunca se atrevía a mirar el cielo, por temor a enamorarse o por pavor a terminar odiándose acabó sin encontrase.

domingo, 30 de octubre de 2016

NUEVOS PROYECTOS

Bueno, bueno... esta entrada va a ser un poco diferente, es básicamente informativa.
El 1 de Noviembre empieza el reto de NaNoWriMo, y tú piensas, qué es eso del NaNoWriMo y por qué me lo cuentas. El NaNoWriMo o National Novel Writing Month (El mes nacional de la escritura de novela) es básicamente una forma de dar un enfoque divertido a la escritura de novela, y el reto consiste en escribir una novela de aproximadamente 175 páginas, que vienen a ser unas 50.000 palabras, durante el mes de noviembre, lo "guay" es que cualquiera puede participar y escribir su propia novela. ¿Quién gana? Pues absolutamente todas aquellas personas que consigan escribir 50.000 palabras antes de la media noche del 30 de noviembre.

En este tipo de retos es más importante la cantidad que la calidad, es decir, es muchísimo mas importante escribir las 50.000 palabras que el hecho de que se a una novela perfecta, además a lo largo del mes hay encuentros por todo el mundo de gente que participa en el reto. Para apuntarte sólo tienes que registrarte en la página web y el 1 de noviembre empezar tu propia novela.
Ahora que ya sabes de qué estoy hablando, ¡YO HE ACEPTADO EL RETO! Y tengo más o menos una idea de lo que quiero hacer, pero como tengo un mes complicado, en cuanto a exámenes y trabajos se refiere, y no sé si voy a poder acabarla a tiempo, he decidido crear mi propio reto para celebrar el mes de la escritura.
Mi reto consiste en escribir todos los días de noviembre un microcuento que tenga aproximadamente 140 caracteres, formato tweet, y si algún día estoy más inspirada puede que se alarguen un poco.
Iré haciendo Spam todos los días, cuando suba el microcuento, por twitter y tú puedes escribir los tuyos donde quieras, si no sabes dónde hacerlo deja un comentario en el microcuento de cada día con tu propio microcuento o puedes compartirlo en Twitter poniendo el #MicrocuentoDiario y mencionandome.
Si quieres ir leyendo los microcuentos o leer algún pequeño avance de la novela, te doy total y absoluta libertad para que sigas el blog (hay un apartado a la derecha del blog que se llama El ejercito de Dumbledore ahí está el botón para empezar a seguir el blog) o me sigas en twitter (@marietarhodes ), Una última cosa, por favor, si vas a hacer alguno de estos retos déjame en un comentario el enlace a tu novela de NaNoWriMo o un enlace al sitio donde vayas a subir tu microcuento diario para yo poder leerlo.
Muchas gracias y ¡QUE COMINENCE EL RETO!

domingo, 16 de octubre de 2016

UN LIBRO MÁS


Poco soy de escribir y perdonad  de antemano, o perdonad si lo llamé amor.
Un cuento intenso de la novela que es la vida, en las que vas pasando las páginas hasta que de pronto termina, ciego el que vive la historia y escribe sus líneas, el que lee desde fuera veía el final que se aproxima .
Despacio y lento, un dolor en el pecho fue apareciendo pues quien diga que lo del corazón es una mentira bien roto se queda en ese momento de tu vida.
El tiempo se detiene en esa última página, mientras que en la biblioteca que es el mundo, la vida sigue su ritmo.
Un punto y final que no te quitas de la cabeza, que no te cause extrañeza, puesto que si fuiste el que más quiso, más daño le hizo.
Cómo ciega la ilusión, la esperanza, las ganas de luchas por ver a la otra persona feliz, porque todo vaya bien. Un capítulo con las páginas en negro en las que todo lo que escribas no se verá, ni servirá para nada pues su decisión está bien arraigada. Cuanto más escribes en ellas mas te perderás en tu propia historia y no sabrás seguir en tu línea, te pierdes en ti mismo, vives un espejismo.
Cuando la historia se termina, no paras de releerla por si puedes arreglarla y así poder continuarla  pero llegara el momento, tiempo al tiempo, en que te des cuenta de empezar un nuevo cuento.

Mr.t AAG

sábado, 15 de octubre de 2016

LA MALETA

Coge tu maleta favorita, esa que te acompaña en todos tus viajes, en todas tus aventuras, la que te llevas para un fin de semana y para un mes entero, esa que te define. Da igual que sea grande o pequeña, de tela o de plástico, lisa o de mil colores, no importa.
Ábrela, vacíala, déjala sin nada, sácalo todo, extiéndela sobre el suelo, sobre la cama o la mesa, donde quieras pero que no se caiga. 
Sí, tú también te has dado cuenta, nos vamos de viaje, o mejor dicho, te vas de viaje.

Ahora que ya lo sabes podemos empezar a hacer la maleta. No te vas para unos días, te vas para toda tu vida. Y sí, sólo tienes esa maleta que has abierto antes, no puedes cambiarla, ya es demasiado tarde.
Vamos a empezar, lo primero, te recomiendo que pienses muy bien todo lo que vas a meter en la maleta porque una vez dentro no hay vuelta atrás.
Abre el armario, examina bien toda tu ropa, date una vuelta por tu habitación, revisa cada rincón y ves eligiendo con cuidado las cosas más importantes, las más grandes, las que más pesan y más ocupan, elige solo tres o cuatro cosas, recuerda que hay mucho más, más pequeño pero también importante.
Piensa en eso que has elegido y ponle nombre. Tú eliges, pero piénsalo bien.
Ahora es el momento de aquello que te acompaña día a día, aquello que no podrías dejar atrás, que es más pequeño pero aun así ocupan mucho. Coge seis o siete pequeñas cosas, y colócalas con cuidado para que no se arruguen, el viaje va a ser largo.

¡Momento del neceser! No tienes mucho hueco y aún faltan más cosas así que no te emociones, coge lo más esencial, el cepillo de dientes, la pasta, el desodorante y poco más... Todas aquellas cosas que necesitas, para ser tú pero sin máscaras, sin maquillaje, sólo tú. 
Casi estamos acabando, ahora tocan los detalles, las pequeñas cosas que te hacen especial, que te ayudan a brillar y que te entretienen. Piensa en todo aquello que te hace feliz y ves colocándolo por cualquier hueco que veas. Para terminar, los zapatos, esto sí que es difícil, habrá que hacer un poco de tetris para meterlos, piensa en todo aquello que te hace poner los pies en el suelo y que a veces no te deja volar libre, pero puedes poner dentro algún detalle que te haga volar lejos. Deja algún huequecito para los suvenires del camino y algún capricho. Eso también es importante, no debemos olvidar las nuevas experiencias.
Sólo falta cerrar la maleta, pero eso te toca hacerlo sin ayuda, no puedes llamar a nadie que se siente encima. Haz lo que puedas pero ciérrala tú.
Y corre, corre porque el tiempo se acaba. El avión está a punto de despegar y lo siento pero aunque en este viaje eres VIP, la vida no espera a nadie.

lunes, 25 de julio de 2016

EN DIFERIDO

Rodeada de picos de montaña, en un tronco a la deriva en medio de un ibón. Perdida, sola, abstracta.
La naturaleza al rededor, mi única  compañía el viento.
Poco a poco meto el pie en el agua, dedo a dedo, sintiendo como me empapa. 
Tranquila, en paz, dormida.
Me meto hasta la rodilla, el agua fría me congela los músculos, siento cosquillas, miro al cielo y veo las nubes, blancas, perfectas, admiro la naturaleza.
Fría, quieta, imperceptible.
Recorro el ibón a nado pero nunca pierdo de vista mi tronco, mi pilar, mi casa. Me lleva la corriente intento salir del círculo vicioso en el que me he metido, me cuesta pero lo consigo.
Poderosa, fuerte, independiente.
Veo la cascada, el agua cayendo por la pared de piedra, el sonido de cada gota chocando con las rocas. Me acerco poco a poco, me pongo debajo y el agua me golpea en los hombros y la cabeza.
Dolorida, agotada, sin fuerzas.
Decido seguir avanzando, subo por las rocas y me quedo detrás de la cascada. Una cortina de agua me desenfoca el mundo, lo veo todo mojado, todo en diferido.
Cristalina, transparente, soñadora.
Sigo andando detrás de la cascada, entró a una cueva oscura, no veo nada pero sigo firme hacia delante, convencida de mi decisión, de vez en cuando giro la cabeza buscando la luz al final del túnel. Ya no veo la salida, mis ojos se han adaptado a la oscuridad. 
Fugaz, desorientada, incansable.
Me quedo quieta y escucho los sonidos de mi alrededor, buscó algo que me diga dónde estoy, qué he hecho, cómo he llegado aquí. Oigo las gotas cayendo, las rocas, los animales, el viento. Oigo mi respiración, mi corazón.
Concentrada, insólita, admirada.
Escucho mi instinto, sigo adelante sin pensar en el miedo, no sé cuánto tiempo llevó andando.
Decidida, intuitiva, valiente.
Veo un rayo de sol que ilumina un pequeño nido vacío. Mi casa. Unos pasos hacia delante, una huellas en el suelo. Mi camino. Una flor marchita. Mis errores. Un cruce de caminos. Mis decisiones. Y al final la luz, la salida.
Asombrada, desubicada, pensativa.
Salgo de la cascada, bajo por las rocas, cruzo la cortina de agua, vuelvo al ibón pero ya no está mi tronco, ha desaparecido, tengo que buscar un nuevo apoyo, una nueva casa, un nuevo pilar. Debo construir poco a poco mi nueva vida.
Temerosa, luchadora, paciente


Con la colaboración de Julius Owsla
Fotografía de Sara Sanchez 

miércoles, 18 de mayo de 2016

LA QUE NO SE ENAMORABA

Ahora estoy sólo. Hacía tanto tiempo que no estaba solo, que se me había olvidado ese vacío que se siente en el corazón, te has ido y me has dejado aquí sin ninguna explicación.
He sentido la necesidad de buscar en todos tus cajones, al principio no sabía que buscaba ahora ya lo sé, buscaba una foto, una nota, una carta quizás, que me explicara el motivo de tu huida, el motivo de mi abandono. He tenido la mala suerte de encontrar entre tu ropa vieja esta carta manuscrita en una servilleta, no sé cuando la escribiste pero esto, esto es demasiado para mí...
"Creo que te quiero, creo que te quiero porque siento la necesidad de decírtelo, creo que te quiero porque me da miedo que conozcas algo de mí que no te guste y te vayas, creo que te quiero porque me da miedo que me hagas daño, porque sé que me dolerá mucho.
¿Y si tú no me quieres? ¿Y si soy sólo un juego? ¿Y si te aburres de mí? ¿Y si en realidad eres un capullo? ¿Y si sólo lo haces para darle celos a ella? ¿Y si es verdad todo lo que dicen? ¿Qué voy a hacer? ¿Qué hago si todo es mentira? ¿Y si me he expuesto demasiado?
¿Me habré autoconvencido de que te quiero o te quiero por qué si? ¿Acaso no es lo mismo? Y si me preguntan por qué te quiero, ¿qué les digo si no lo sé? ¿Y si no sé por qué te quiero en realidad te quiero? Creo que sí.
Me encantaría saber qué piensas, qué sientes, qué buscas... Me encantaría saber que soy para ti, por qué empezaste todo esto, cómo empezó y cuándo... Me encantaría que no hubiera tantos baches, tantas preguntas sin respuesta... Quiero confiar en ti, quiero pensar que todo es cierto, pero miles de voces me dicen que sólo soy un juguete, que tienes un plan perfecto y que cuando ya no me necesites para ello, me abandonarás a mi suerte. Pero yo te veo y no veo eso, veo algo, algo diferente que me atrapa, veo sensibilidad, veo cariño, veo tanto... Que no sé si lo que veo es real o lo creas para mí, para engañarme, para engañarles...
¿Qué les cuentas a tus amigos sobre mí? ¿Les cuentas cada lunes como he vuelto a picar? ¿Te ríes cada vez que me llamas cielo? ¿Planeas cada una de tus frases? ¿Te inventas cada beso? ¿Puedo ser tan tonta de no darme cuenta si todo es falso? ¿No la estás provocando a ella para que vuelva? ¿Para que sufra? ¿Puedes llegar a ser tan frío y calculador? Tú, el mismo que me abraza y me consuela, el mismo que cambia sus planes por mí, el mismo que yo veo.
Y yo que no quería cerrar mis puertas, yo que quería reírme de la vida, yo la difícil, la segura, yo la que elegía, la que nunca se pillaba, yo la que nunca se rayaba por ninguno, yo que me jure no querer todavía, yo la que me prometí que nadie me engañaría, yo la que no se enamoraba... Que hago si todo es una función, un chiste, un juego..."
Por qué nunca me lo preguntaste, por qué  nunca me contaste tus dudas y tus miedos, por qué te los callaste y actuaste como si no pasara nada. Ahora entiendo tus cambios de humor, ahora entiendo tus lágrimas a escondidas y tus idas y venidas, ¿por qué tanto dolor? ¿Por qué esta falta de comunicación? ¿Qué tengo que hacer para que vuelvas? O mejor dicho, ¿queda alguna oportunidad para mí? Cómo te digo que te quiero, que no hay otras, que tú eres la única, que ella ya no importa. ¿Si te cuento todos mis secretos los creerías o seguirías pensando que todo es un juego? ¿Qué hago ahora que te has ido y que no vuelves? ¿Ahora que te busco y no te encuentro? ¿Qué hago yo con mi corazón vacío? Te quiero, que lo sepas....

jueves, 5 de mayo de 2016

¿TE SUBES?

La vida es como una montaña rusa llena de subidas, bajadas, caídas libres y giros de trescientos sesenta grados.
Las subidas son lentas y nos dan tiempo para prepararnos y mentalizarnos para una próxima bajada. Las bajadas son rápidas y nos impulsan para realizar nuevos giros que nos marean y nos ponen todo cabeza abajo, pero llega un momento en el que volvemos a estar con los pies en su sitio y entonces vuelven las subidas, las épocas de recuperación y los momentos de descanso. De vez en cuando podemos encontrarnos alguna que otra caída libre que nos revuelve el estómago y nos hace caer al subsuelo, pero después siempre llega alguna curva que nos manda de vuelta al cielo.
La adrenalina de la subida, como las emociones en la vida, la soltamos de golpe, con un grito, mientras caemos y giramos. Los tramos rectos nos aburren, pero demasiadas subidas y bajadas nos cansan, así somos de inconformistas, lo queremos todo, queremos mantenernos en una constante cuesta abajo de alegría y diversión, pero ¡hay amigo! necesitamos subidas. Subidas que nos enseñen que todo es posible, caídas libres que nos ayuden a recapacitar y giros de trescientos sesenta grados que nos ponga la vida del revés y nos impulsen a probar nuevas experiencias.
Nos pasamos la mayor parte de nuestra vida aprendiendo, y yo me pregunto qué si en algún momento realmente dejaré de aprender, porque yo creo que no. La sociedad nos impulsa a estudiar, a ser los mejores de nuestro curso, a estudiar una carrera y tener matricula en todo, pero realmente eso ¿para qué nos sirve? Sí, es cierto, te sirve para tener un buen trabajo o mejor dicho para tener más posibilidades de obtener un buen trabajo. Yo creo que, teniendo en cuenta que la vida, como he dicho antes, no para de sorprendernos, es más importante disfrutar con lo que haces, aprender de todos los pequeños detalles, vivir viendo la parte positiva, no agobiarse con los problemas, ser objetivo... Y muchos me dirán, pero que fácil es decirlo y que difícil hacerlo, y sí, soy la primera que me agobio por todo, que cualquier cambio en mis planes es un dilema existencial, pero por intentarlo no se pierde nada ¿no? A mí siempre me han dicho que quien la sigue la consigue, así que deja de poner escusas para todo, ponte la mejor sonrisa que tengas y sal a comerte el mundo.


martes, 19 de abril de 2016

DÍAS DE LLUVIA

Hoy es un día gris, las nubes negras cubren el cielo y no dejan pasar la luz, las nubes negras tienen envidia y lloran.
Las nubes negras no saben que con su llanto riegan bosques y campos, no saben que crean en las ciudades días espectaculares.
Un día de lluvia a priori parece un día perdido, amargado, pero los días de lluvia surgen bailes de paraguas por las calles estrechas, pasos acelerados y resbalones improvisados.
Los portales se convierten en refugios que aguardan a los que buscan valentía para salir, en las marquesinas de las paradas se celebran fiestas esperando el autobús, los paraguas, demasiado estrechos, crean abrazos y caricias inocentes.
Un día de lluvia y unos cuantos locos puede ser la mejor combinación para pasar una tarde llena de alegría y diversión, un comentario inocente que puede acabar con una danza de la lluvia y la mejor tarde de tu vida.
La lluvia sin querer nos hace crecer, nos enseña a disfrutar y aprender a amar.
Días grises, olor a humedad.

sábado, 19 de marzo de 2016

YA QUEDA POCO

Ya queda muy poco para Semana Santa y yo, desde hace tres años, la celebro siempre rodeada de un montón de personas increíbles en un pequeño pueblo de Navarra, Artieda. La pascua para mí son unos días muy especiales, cargados de sentimientos a flor de piel, personas y experiencias inolvidables, cada pascua te hace ver algo nuevo, te aporta nuevas ideas, nuevos sentimientos y nuevos amigos.
En Artieda, se crea un ambiente único que nos ayuda a mirar dentro de nosotros, conocernos un poco más y conocer un poco más a Dios. 
Como queda poquito hay que ir calentando motores y para estar preparados para esta súper experiencia, me he tomado la libertad de hacerte pensar un poco.
Dale al play y deja que estas ideas te hagan buscar tu propia respuesta.
Me puedes dejar tu opinión o respuesta a estas preguntas en los comentarios, también puedes compartir el blog con todos tus amigos para que vean estos videos y se preparen para la Semana Santa.






jueves, 3 de marzo de 2016

CADA MINUTO

Hay muchas cosas en nuestro día a día que sin darnos cuenta nos van guiando por un camino concreto, muchas de esas cosas las elegimos nosotros mismos pero muchas otras son circunstancias que simplemente nos vienen dadas, podríamos decir que cada uno de nosotros es su propio sistema y todo lo que nos rodea es entorno (los exámenes me afectan).
No sé si alguna vez te ha pasado, pero se me ocurre que es posible que muchas de las personas que se cruzan en nuestra vida están ahí para dejarnos huella y enseñarnos algo, lo que normalmente no pensamos es que nosotros mismos somos parte del entorno de los sistemas que nos rodean, es decir, nosotros también entramos en la vida de otras personas sólo para enseñarles algo, y por esa sencilla razón debemos dejar que las personas que han cumplido su “misión” se alejen, pero al mismo tiempo debemos luchar por las personas que queremos, la pregunta es: ¿cómo sabemos a qué personas debemos dejar "libres" y por qué personas debemos luchar? No sé la respuesta a esta pregunta y probablemente nunca la sabré, o puede que sí, es algo que, como todo, se aprende a base de errores y tiempo, lo que sí sé es que no debemos renunciar a la oportunidad de que personas nuevas entren en nuestra vida, debemos tener la capacidad una mente abierta que no nos lleve a juzgar a nadie sin conocerlo, no juzgues a un libro por su portada, léelo y cuando lo hayas hecho podrás dar tu opinión sobre él. Otra cosa que hacemos por lo general, es dejarnos llevar por lo que dice a gente y ponemos etiquetas, muchas etiquetas, tenemos que intentar probar y conocer para poder opinar, opinamos demás y sobre cosas y personas que no conocemos, la opinión es el grado de conocimiento más bajo, es importante saber que todos podemos cambiar, no sé si alguna vez lo has visto o vivido pero hay personas que te hacen cambiar, personas que te dejan marcado y una vez que eso pasa ya no vuelves a ser la misma persona de antes; pasa lo mismo con las experiencias, cada uno afronta los mismos hechos de diferente forma, porque cada uno lleva consigo un historial de hechos diferentes, no puedes exigir a nadie que sienta o entienda lo mismo que tú ante las misma situaciones, y eso es lo bonito y paradójico de la vida, somos iguales pero al mismo tiempo somos completamente diferentes unos de otros, y no, no me estoy contradiciendo, porque todos como personas somos iguales en derechos, iguales en deberes, etc. pero somos muy diferentes unos de otros, hay diferencias que podemos ver a simple vista: somos rubios, morenos, altos, bajos, mayores, pequeños, vestimos de una forma o de otra, llevamos pendientes o no, y aunque parezca mentira creo firmemente que hay muchísimas más diferencias que no podemos ver que de las que podemos ver, cada uno es único y a la vez copia, somos como somos por lo que hemos vivido y cada elección que tomamos por nosotros mismos, que alguien toma por nosotros o simplemente cada situación que nos proporciona la divina providencia nos condiciona el resto de decisiones que debemos tomar en el futuro; hay una frase que alguien me dijo y estoy totalmente de acuerdo y es que incluso cuando creemos que no estamos eligiendo, lo estamos haciendo, porque en ese momento eliges no elegir, me resulta muy curiosa esta afirmación porque, según lo que yo entiendo, cada minuto estamos tomando decisiones que van a marcar nuestro futuro queramos o no.
Es más curioso ver cómo nos rompemos la cabeza intentando elegir lo mejor, lo más conveniente o lo que más nos apetece, intentando perder siempre lo menos posible, las menos oportunidades o intentando no cerrarnos puertas pero, como dicen, cuando se cierra una puerta se abre una ventana y no debemos preocuparnos más de la cuenta por ello, es importante pararse a pensar las cosas que realmente tienen una importancia, hay que dar a las cosas la importancia que tienen realmente aunque nos cueste mucho, muchísimo, sobretodo no debemos menospreciar lo problemas de los demás, pero nos rompemos la cabeza en busca de la solución menos mala y muchas veces lo mejor es elegir sin pensar, cerrar los ojos y dejar que el instinto nos guíe, pero cuidado, no todo podemos dejárselo al instinto, no seamos animales.
Tú qué piensas sobre esto de las decisiones, las diferencias o igualdades, el camino que seguimos… me encanta conocer diferentes puntos de vista, déjame un comentario con tu opinión y recuerda lo hagas o no, estarás ganando y perdiendo.

lunes, 29 de febrero de 2016

UN FINAL INESPERADO

Era tan cuidadosa que siempre se levantaba de la cama primero con el pie derecho, pero ese día en especial se levantó cuidadosamente, primero retiró el edredón, luego se sentó en la cama, bajo primero el pie derecho y luego el izquierdo, se puso las zapatillas y se levantó, abrió la persiana y fue a desayunar, se hizo dos tostadas con tomate, un zumo de naranja, un café y  un bol de fruta, cuando termino se lavó los dientes y se vistió con unos pantalones pitillos negros, unos tacones estilo clásico, su blusa favorita y una americana con los puños doblados, cogió el maletín el bolso y salió de casa.
Era el día más importante de la vida de Erika y quería que todo saliera perfecto, le gustaba tenerlo todo controlado y siempre intentaba tener una sonrisa, todo había ido de maravilla esa mañana, hacía un rato que se había despedido de sus compañeros, y aunque nadie lo sabía, para ella había sido muy importante, aunque no entendía por qué.
Iba camino de un restaurante chino del que era fan, hoy tocaba comer con toda su familia, pero antes pasaría por el hospital a firmar algunos papeles, tenía tiempo de sobra, así que decidió cambiarse y se puso un vestido coral y unas manoletinas, se sentía algo cansada. 
Todos la esperaban para empezar a comer, estaban encantados de verse, la comida fue tranquila todos conversaban alegremente y entre rollito y rollito se escuchaban viejas anécdotas y recuerdos en familia, con los postres llegaron las preguntas por los proyecto futuros y los sueños inalcanzables, Erika sonreía y escuchaba hasta que su prima le preguntó por sus sueños, esa pregunta rompió un poco más el corazón de Erika pero nadie se dio cuenta, ella contestó que su sueño se cumplía cada día y que estaba encantada de estar con ellos, siempre había sido muy poética y sólo ella misma y su padre se extrañaron de aquella contestación, tras el café todos se fueron yendo poco a poco hasta que sólo quedó en el restaurante Erika y su padre, este la miraba con cara de preocupación pero ella le abrazó y  le susurro que todo estaba bien.
Cuando llegó a casa eran ya las ocho y media, allí la esperaba la única persona con la que a Erika le apetecía estar, se dejó llevar por el abrazo cálido y reconfortante de bienvenida, era lo único que necesitaba en ese momento, se puso un camisón y unos calcetines, se sentía agotada y quería estar lo más cómoda posible, sentados en el sofá comiendo pizza hablaban de todo lo que habían vivido y de lo mucho que se querían con la televisión de fondo esperaban sin saberlo el final inevitable de aquel día.
Se habían quedado dormidos en el sofá, Erika se despertó sobre saltada y besó, casi de forma inconsciente, a la única persona que había amado, en ese momento el piso quedó totalmente destruido.

viernes, 19 de febrero de 2016

RETRATADA

Era dulce y tierna pero fría y callada a primera vista.
Divagaba por las calles buscando en ellas olvidar todos sus recuerdos y caminaba sin rumbo como persiguiendo a la libertad.
Entraba y salía de todas y cada una de las tiendas sin encontrar nada original que la enamorara.
Se sentaba en cualquier terraza con la mirada perdida y era observada por cada persona que pasaba, pero ella no lo sabía.
Iba y venía, fijándose en cada pequeño rincón olvidado de aquella enorme ciudad que siempre corría.
Se quedaba de pie en medio de la plaza más concurrida y observaba, observaba las caras de aquellos que la cruzaban sin pararse a admirar la belleza del lugar.
Se sentaba a la entrada del museo más famoso, y admiraba cada rostro que entraba y salía.
Soñaba, sentada en el césped de un hermoso parque, con la felicidad que en otros encontraba.
Volvía cada día a su pequeño piso reacia a encontrarse con la rutina que la perseguía.
Leía sentada en la terraza, ajena a todo lo que la rodeaba.
Creía ser invisible para el mundo, pero lo que no sabía es que en esa ciudad que ella recorría y observaba, era admirada y envidiada.
En cada paseo sin rumbo, en cada entrada y salida, ella era observada y perseguida.
En todas las tardes en el museo y en todos los atardeceres en el parque, ella era acompañada y cuidada.
En la mesa de al lado en cada terraza se sentaba desesperado el chico que tanto la amaba.
Y es que ella era su inspiración tan buscada, ella era el rostro que se enfocaba en mitad de una plaza abarrotada.
En cada pequeño rincón olvidado, ella había sido retratada.
La chica sin alas que volaba, la chica que él cada día observaba en su balcón.
Su musa, su modelo perfecta, su único amor.
Y fue el día que ella se atrevió a olvidar su lugar en la puerta del museo, a entrar  y experimentar una visita, vio lo que nunca habría pensado que sería posible, se vio, en todas las fotos de la exposición, ella entre la multitud borrosa, ella en su pequeño balcón, ella junto al viejo árbol del parque, ella a la entrada del museo, ella en cada  rincón, pero la foto que más le impactó fue verse en la terraza y fijarse en todos los ojos que, sin ella darse cuenta, la reconocían.
Y fue él, quien también ese día guardando los miedos en un cajón, la fotografió, sorprendida ante su propio retrato y se acercó a ella.
Y durante un tiempo los dos recorrieron las calles sin rumbo, observaron la felicidad en el rostro reflejado en el espejo cada mañana y tomaron café, cada día, en una terraza diferente.
Pero ella, al cabo del tiempo, olvidando por qué había empezado todo, volvió en busca de aquello que antes perseguía, y siguió siendo la chica que el tanto amaba y retrataba.
Ella volvió a caminar sin rumbo, a leer en el balcón y a sentarse en las terrazas ajena al mundo.
Él volvió a sacar su cámara y a esconderse tras las sombras retratando a su amada.
Los dos se amaban pero de nuevo, como cada año, ella le había olvidado.



lunes, 15 de febrero de 2016

ESOS DÍAS

Hoy es uno de esos días en los que me encantaría tenerte cerca, hoy es uno de esos días que eran sólo nuestros, esos en los que las guerras de cosquillas acababan en caricias y besos de buenos días.
Hace más de quince de esos días que ya no hablamos, hace por lo menos dos meses que no tengo noticias tuyas. En estos días tan grises mi memoria te trae de vuelta y mi corazón, que no deja de sangrar, se pregunta dónde estás, mi orgullo no me deja en paz y mis labios sólo te quieren volver a besar. Te recuerdo en cada cojín del sofá, en cada cuadro que ya no está, sigues en la cocina cantándole a la libertad mientras tus manos, sin guía, preparan algo para merendar.
Por favor ten piedad, no me vuelvas a torturar, no vuelvas si te vas a marchar, no me vuelvas a ilusionar, no me intentes volver a atrapar, déjalo estar.
Alguno de esos días mis manos engañan al orgullo y te mandan un “Hola, ¿qué tal?” pero tus dedos, demasiado lentos, me vuelven a recordar que ya no estás y que aunque todo parezca ser normal, nunca será igual. La conversación no va mucho más allá, y un “Yo igual.” Me devuelve a la realidad, en un avión que se acaba de estrellar. Pero yo, en mi ilusión de niña, espero, sin saberlo, cada noche un tú con muchas u que me haga olvidar que debo dejar de soñar y me enseñe a volar.
Creo que no te quiero olvidar, cómo podría dejar escapar tantos  recuerdos, tú me enseñaste la felicidad y me aconsejaste escapar de un mundo que se aproxima cada día más a su final, tú que me enseñaste a volar y me hiciste saltar prometiendo que no me dejarías fallar, y dime ¿dónde estás?
No pienses que para mí fue un simple juego de azar, no creas que no lo pasé mal, no te permitas olvidar la verdad.
Promete que cuando te acuerdes de mí me hablarás y cada vez que en tu cabeza aparezca un “¿Por qué no volverlo a intentar?” me llamarás en busca de aquella felicidad que tanto nos ha hecho llorar.

Hoy es uno de esos días y te vuelvo a preguntar, ¿Por qué no estás?

lunes, 25 de enero de 2016

OPERACIÓN POST-NAVIDAD

Lo primero que hice nada más llegar a casa fue tirarme, literalmente, en el sofá. El gimnasio acaba con mis ganas de hacer cualquier cosa y un día acabará conmigo.
La verdad es que en las dos horas que paso allí, casi no paro ni a beber agua por ejemplo, hoy, nada más entrar he ido a la cinta y me he pasado casi una hora corriendo al ritmo de la música más cañera que han encontrado en todo Spotify, no obstante he bebido agua sí , no me quiero deshidratar, pero sin parar la maldita cinta, después me he ido a clase de zumba, si de zumba, ese baile que más que un baile parece una tortura china, allí te mueves más que un perro hiperactivo de esos de los anuncios de comida, lo bueno del zumba es que el profesor está como un tren, eso sí, como te vea bebiendo agua un segundo, te pone la cruz y te machaca el doble, con los típicos comentarios, esos que usan para llamarte floja, si eso del tipo venga Ana, mueve un poco más esa cadera que no es de plomo, o sube ese brazo que no le vas a dar al techo tranquila, es cierto que luego lo compensa invitándonos a unas tortitas de arroz, claro que saben más a cartón que a arroz, pero bueno todo sea por la operación post-navidad...

Firmado: Ana, la cotorra del barrio.

lunes, 4 de enero de 2016

¿NUEVO AÑO?

Ya ha empezado el 2016 un nuevo año, aunque eso cualquiera que lea esto en su debido momento ya lo sabe, a pesar de que se celebra, yo no noto la diferencia de un año a otro hasta que no estoy aproximadamente a finales de febrero y miro un poco para atrás, me pasa como en el cumpleaños, a pesar de que ese día lleves un año más de vida tu vida de verdad no cambia por ese simple hecho, tu vida cambia con las posibilidades que tienes debido a esa supuesta experiencia porque en realidad los años de cada persona ¿de qué sirven? Los años nos proporcionan experiencias, pero los años en sí mismos sin esas experiencias y oportunidades no serían nada, una persona que ha vivido encerrada en su casa, solo comunicándose con sus familiares más cercanos, que no ha visto el mundo, que no se ha relacionado con él, en definitiva una persona que no ha tenido experiencias de vida, por mucho que tenga 16, 18, 30 o 50 años será como si tuviera 2 o 3 porque es una persona que no tiene experiencia.
Un año nuevo, en teoría y según cuentan, es un año lleno de nuevas experiencias y oportunidades, sí es cierto, pero igual que cada nuevo mes tiene nuevas oportunidades y cada nuevo día nos proporciona nuevas experiencias, sin embargo al cambio de año le proporcionamos una importancia mucho mayor ¿por qué? Puede ser porque es un fin de ciclo, es decir, a partir del final de año los meses vuelven a empezar, los días comienzan a correr, las fiestas se vuelven a repetir, todo vuelve al principio pero nada será igual.
Otra pregunta que me hago es ¿por qué el año acaba en diciembre y comienza en enero? ¿Por qué no empezar el año en septiembre? Seguramente esa pregunta dentro de unos años cuando esté trabajando y mis vacaciones de verano no sean tan largas como ahora, cuando cada septiembre no comience algo que de verdad sí hace que mi vida cambie un poco con su inicio, esa pregunta no tendrá mucho sentido. Actualmente y desde hace aproximadamente toda mi vida cada septiembre he iniciado un nuevo curso escolar, doy gracias por ello, cada septiembre he tenido que volver al colegio y empezar un nuevo año escolar, cada año ha sido más difícil con respecto al anterior y cada año he aprendido cosas totalmente nuevas para mí, tanto académicas como personales, actualmente para mí tiene más sentido hablar de un cambio de año en septiembre que en enero y creo que al igual que a mí le pasa a mucha gente que conozco, porque la mayoría habla de años refiriéndose a cursos, supongo, que como he dicho antes, con el paso de los años, los de verdad, eso cambiará.
Nunca se me ha dado bien eso de pararme a pensar y mirar todo lo que he hecho en el año anterior, ver qué he aprendido, qué ha merecido la pena y qué no, principalmente porque suelo mezclar los años  y porque podríamos decir que tengo mala memoria, pero este año lo he intentado y me he dado cuenta de que he conocido a gente maravillosa, gente nueva y gente que conocía pero no tanto, me he dado cuenta de que he cambiado mucho a lo largo de este año, me he fijado en que he vivido experiencias increíbles que justo hace un año ni si quiera me imaginaba que pasarían, he renunciado a algunas cosas y he conseguido otras, pero seguramente esto también te ha pasado a ti y como a mí, te ha pasado desapercibido hasta ahora mismo que te has parado, has dejado absolutamente todo y has empezado a pensar en esa o esas personas que has conocido, en esos pequeños cambios que has recordado, en esas aventuras que jamás imaginaste, en todas esas cosas a las que has renunciado pero también en todas esas que has conseguido, porque leyendo esto todo eso ha venido a tu mente, de forma inconsciente te has dado cuenta de ello. Ahora te toca valorar cómo ha sido el año y qué debes hacer para que este nuevo año, que a priori no parece cambiar nada, pueda ser mejor porque todo puede mejorar, es más, todo mejora. Aprovecha todas las oportunidades que te ofrece el año. Una persona que me ha enseñado mucho me dijo una vez que cuando estas interpretando un papel y te metes dentro del personajes, lo haces tuyo debes dejar que los impulsos fluyan por tu cuerpo y debes dejarte llevar por ellos, en ese momento pensé que era incapaz de pegar a un compañero sólo porque a mi personaje le apeteciera hacerlo, pero ahora me doy cuenta de que ese día, el día que cogí todos los impulsos que pasaban por mi cuerpo y los seguí, les hice caso y pegué una bofetada al pobre chico que le tocó improvisar conmigo, ese día aprendí muchísimo más que lo que creía haber aprendido y es que la vida es un teatro y cada uno interpretamos nuestro propio papel. Debemos dejarnos guiar por los impulsos sin tener miedo a fallar o a equivocarnos, siempre con conciencia y respeto pero nunca con miedo.

Después de todo es posible que celebrar el año nuevo en enero sea sólo por tradición o puede que tenga algún otro motivo, da igual que hables en cursos o en años, del 31/12/15 no hay mucha diferencia al 1 /1/16, pero es una buena excusa para mirar atrás y pensar en todo un poco, para hacer nuevos propósitos y fijar nuevas metas, lo importante es que lo hagas y sobre todo que las cumplas.